La Luna 18

Casos amoroso, sueños irrealistas, sentirse confundido, sentirse ansioso, preocupado y aprensivo, confiar en la intuición, capacidad intuitiva, perder la sensación de la realidad, paso al otro mundo, fuerzas malas básicas del inconsciente.  En el Tarot, La Luna revela una persona que está viviendo emociones fuertes. En ese sentido, esta Carta significa ilusión, porque la realidad puede ser fácilmente distorsionada frente a las emociones descontroladas. Algunos autores designan esta Carta como "la noche oscura del alma" o "la noche del espíritu", lo que demuestra bien el carácter sombrío a ella asociada.

La vibración de La Luna puede ser positiva o negativa según el modo como la persona se relaciona con su lado emocional. Una persona creativa e intuitiva, verá sus cualidades mejoradas. Su genio artístico puede revelarse y atravesar una fase extraordinariamente creativa. Aquellos demasiado racionales y con dificultad para lidiar con sus propios sentimientos, pueden quedar aún más desorientados y sentir gran dificultad en superar la instabilidad emocional en que se sumergen.

El mensaje de esta Carta, frente a un estado de emociones indisciplinadas, se traduce en la necesidad de distanciamiento y de encarar la situación que provoca ansiedad con serenidad. Sin embargo, es probable que este sea un camino difícil de recorrer al exigir una gran madurez emocional y un elevado empeño en deconstruir las ilusiones y las emociones negativas. Aun así, la tenue luz de la Luna está presente y muestra el camino, aunque parezca más difícil alcanzar los objetivos.

Según la Numerología, el 18 se refiere al número 9 (1+8=9), su base, que es la Carta El Ermitaño. En el Tarot, las simbologías de La Luna y El Ermitaño están fuertemente interconectadas. Ambas se remiten al mundo interior, a las emociones.

También están relacionadas con el instinto, o inconsciente, el mundo invisible y el lado femenino de la personalidad.